El Gobierno español ha rebajado el IVA de la electricidad del 21% al 5%, y los precios de la luz para los consumidores se han reducido un 5,2% desde el martes y su techo está topado. Sin embargo, sectores enteros de la economía española siguen en crisis.
En primer lugar, estos son agricultores que tienen que pagar por el riego. España tiene casi 4 millones de hectáreas de regadío, y el coste de la ingeniería hidráulica ha puesto a muchas explotaciones al borde de la supervivencia.
“Aquí están los resultados: el verano pasado gastamos 70.000 euros. Y este año, 247.000. Así que estamos hablando del hecho de que, en la mayoría de los casos, los agricultores trabajan con pérdidas”.
En Madrid, los propietarios de hoteles y restaurantes apagaron las luces durante cinco minutos el martes por la noche para protestar por los altos precios, con la esperanza de llamar la atención de las autoridades sobre su situación.
“Podemos decir que todos los gastos de hotel se han triplicado. Todavía no nos recuperamos de la pandemia, tenemos poca liquidez y no tenemos reservas para maniobrar. Ahora, cuando los gastos han sido tres o tres veces y media más altos durante varios meses, simplemente no podemos pagar”.
Según datos publicados en los medios españoles la semana pasada, 5 millones de familias en el país ya viven en la pobreza energética, lo que significa que no podrán permitirse pagar la calefacción el próximo invierno.