Los agricultores de Valencia, en el sureste de España, están impactados después de que una fuerte tormenta azotó la región durante el fin de semana, destruyendo cultivos valorados en cerca de 40 millones de euros en miles de hectáreas. En algunos casos, se vio afectado casi el 100% de las cosechas de algunos agricultores, según la Asociación de Agricultores de Valencia.
Este considerable desastre agrícola ocurrió cuando varias regiones de Valencia y Castellón, ambas ubicadas en la costa del Mar Balear, fueron golpeadas por una intensa granizada el domingo.
“La tormenta causó daños devastadores en los cultivos, algunos de los cuales estaban a punto de ser cosechados”, dijo la asociación.
La agencia meteorológica de la región de Valencia advirtió que la tormenta se movería “rápidamente”, pero traería “fuertes lluvias y granizo grande”. Se registraron “fuertes ráfagas de viento” y más de 1.300 rayos. El tamaño del granizo superaba el de una moneda de 1 euro.
Las estimaciones iniciales indican que el temporal resultó en pérdidas de aproximadamente 40 millones de euros, en más de 15.000 hectáreas. Varios agricultores vieron afectado “el 100% de la cosecha”, afectando a viñedos, frutas cítricas, caquis, aguacates, almendros, olivos, arroz y verduras.
Zonas más Afectadas
La zona más afectada parece ser la región de Utiel-Requena, que registró “una capa de piedras de unos cuatro centímetros de espesor” en más de 8.000 hectáreas. Solo esa área se estima que tiene pérdidas superiores a los 11 millones de euros, con algunos viticultores perdiendo “toda su producción de uva en plena temporada de cosecha”, señaló la asociación.
Además, muchos de estos agricultores enfrentan “graves daños” en sus viñas que podrían generar problemas en la próxima temporada. La asociación prevé que Utiel-Requena, principal productor de uvas de la región, experimentará una disminución de más del 60% en la cosecha en comparación con las medias anuales recientes.
El Cambio Climático como Causante
La intensa tormenta es solo el último ejemplo del impacto del cambio climático. A medida que las temperaturas globales siguen aumentando, impulsarán eventos extremos más frecuentes e intensos.
El año pasado, el Ministerio de Agricultura, Naturaleza y Calidad Alimentaria de los Países Bajos publicó un informe indicando que España pierde el 6% de su producción agrícola anual debido al clima extremo. La agroalimentación, motor de la economía española, es una de las áreas más amenazadas por el cambio climático.
“El cambio climático es uno de los grandes desafíos para la agricultura y la alimentación”, señala el informe. “Este riesgo es mayor en los países mediterráneos, siendo España una de las regiones más afectadas, donde el 75% de su superficie ya corre riesgo de desertificación.”
La calidad de producción podría ver una “significativa caída” si las temperaturas globales aumentan en 1,5 grados Celsius. Si superan los 2 grados Celsius, se esperan más sequías y menos lluvias, afectando la agricultura.
El informe concluye:
“Aunque hay medidas de adaptación, su capacidad es limitada si no se reduce la emisión de gases de efecto invernadero.”