Miles de trabajadores españoles marcharon en Madrid el jueves, organizados por los sindicatos más grandes de España, exigiendo salarios más altos para compensar el aumento del costo de vida.
Miembros de los sindicatos UGT y CCOO marcharon por la capital española bajo el lema “Salario o Conflicto”. Los sindicatos exigen que el gobierno español y los líderes empresariales acuerden aumentar el salario mínimo por encima de los 1.000 euros mensuales actuales en respuesta a la inflación desbocada que recientemente comenzó a disminuir.
“Hoy, lamentablemente, por la situación que estamos enfrentando, los salarios no cubren nuestras necesidades básicas”, dijo la marchante Carmen Troiano, de 55 años.
Al igual que con otros países, España está viendo aumentos de precios impulsados por el aumento de los costos del combustible, exacerbado por la invasión de Ucrania por parte de Rusia, lo que reduce los suministros. El aumento de los precios de los alimentos en Europa ha provocado protestas en todo el continente. El aumento de las tasas de interés, utilizado por las autoridades monetarias para reducir la inflación, también provocó un aumento en los pagos de hipotecas.
La organización benéfica católica Caritas difundió este jueves un informe que concluye que tres de cada 10 familias españolas no cuentan con los recursos económicos para mantener “condiciones de vida dignas”.
La inflación en España alcanzó su punto máximo este verano con un 10,8% en julio y se desaceleró moderadamente hasta el 7,3% en octubre.
El presidente de la asociación española de empresarios CEOE, que negocia los salarios con los sindicatos y el gobierno, dijo que podría haber un aumento si no estuvieran indexados directamente a la inflación.
“No decimos que no a las subidas de salarios. Pero no podemos estar de acuerdo en que las subidas de salarios estén en línea con la inflación”, dijo el líder de CEOE, Antonio Garamendi, en una entrevista con Radio Nacional de España.